Maquillador aplicando máscara de pestañas durante la prueba de maquillaje de una novia

La importancia de una prueba de maquillaje para bodas al organizar tu gran día.

Cuando comenzamos Aire de Fiesta, nos dedicábamos exclusivamente a la decoración del evento. La prueba de maquillaje, los preparativos de la novia o la logística previa no formaban parte de nuestros servicios. Sin embargo, en cada boda presenciábamos situaciones que afectaban a las novias y, aunque no eran nuestra responsabilidad, nos dejaban un sabor amargo.

Esas experiencias nos impulsaron a ampliar nuestros servicios y asumir la coordinación integral, para garantizar que cada detalle —incluido el maquillaje, los tiempos de preparación y la organización previa— estuviera bajo control y evitar contratiempos innecesarios.

Hoy en día, la mayoría de los eventos, y prácticamente todas las bodas, contratan nuestra coordinación integral. Esta evolución surge de todo lo que hemos aprendido en aquellos primeros años, donde cada situación nos mostró la importancia de tener todo bajo control.

Uno de los aprendizajes más relevantes fue entender la importancia del maquillaje de la novia. En aquella época, presenciamos ceremonias retrasadas porque la novia no estaba conforme con el maquillaje. 

Aunque parezca un detalle menor, el impacto puede ser enorme. Al oscurecer, se pierde la luz perfecta del atardecer, afectando la fotografía, el video y la experiencia en general. 

Retrasar todo el evento significaba dejar a los invitados desatendidos y correr el programa. En el peor de los casos, esto podía reducir el tiempo de fiesta si el lugar o los proveedores no aceptaban el retraso. Todo esto “solo” porque la novia se negaba a salir sin corregir el maquillaje.

Por eso, realizar una prueba de maquillaje a la novia se convirtió en una prioridad dentro de nuestra coordinación integral. No se trata solo de garantizar un resultado impecable, sino de prevenir contratiempos y frustraciones. En Aire de Fiesta consideramos esencial que cada novia se sienta radiante y auténtica, evitando un maquillaje que la haga sentir incómoda en un día tan especial.

Virginia frente al espejo mientras el maquillador finaliza su prueba de maquillaje

¿Cómo organizamos la prueba de maquillaje para bodas?

El proceso comienza una vez que nuestra wedding planner confirma la fecha de la boda. Creamos un grupo de trabajo con nuestro estilista habitual, Michel Rego,  reconocido por su profesionalismo y calidad en el sector. Todos los procesos que describimos a continuación aplican exclusivamente cuando el maquillaje está a su cargo. Si la novia decide contratar a otro maquillador, estos acuerdos pueden variar y deberán coordinarse de manera independiente.

Ante todo, solicitamos a la novia que comparta referencias de maquillaje y peinado, así como fotografías personales, que se convierten en el punto de partida.

Aunque cada prueba es única, todas comparten un enfoque común: el maquillador suele realizar en uno de los ojos una primera versión basada en las preferencias de la novia. Luego, en el otro, propone una alternativa que, según su experiencia, podría favorecerla aún más sin alejarse de la inspiración inicial. Esto permite comparar ambas opciones y decidir cuál es la mejor o si es necesario hacer ajustes adicionales.

Rebecca con los ojos cerrados mientras el maquillador trabaja su look nupcial

¿Cuánto tiempo que puede requerir  la prueba de maquillaje?

La duración de la prueba depende de la complejidad del maquillaje y el peinado, pero suele ser entre tres y cuatro horas. Ese tiempo es fundamental para experimentar con diferentes estilos y resolver cualquier detalle técnico antes de la boda.

La prueba puede llevarse a cabo en el lugar donde la novia se hospede o en nuestra sede, que cuenta con condiciones de iluminación ideales para trabajar con precisión y garantizar un acabado perfecto.

Maquillador aplica polvos a la novia durante su prueba de maquillaje, reflejados ambos en un espejo redondo

Consejos prácticos para la prueba de maquillaje

  • Vístete de blanco: Elige una prenda blanca similar al color de tu vestido de novia. Así podrás ver cómo el maquillaje refleja en tu piel con ese tono y asegurarte de que el resultado sea armónico y favorecedor.
  • Lleva tus accesorios: Si ya tienes definidos los accesorios siempre que puedas llévalos a la prueba. Esto te permitirá visualizar el resultado completo y asegurarte de que todo armonice a la perfección. De lo contrario no olvides compartir con tu estilista las fotos de los mismos en cuanto los tengas. 
  • Documenta el resultado con fotos: Aunque el estilista seguramente tome algunas imágenes, también puedes hacerlo tú misma, usando tanto luz natural como luz artificial. Esto te permitirá evaluar cómo luce el maquillaje bajo distintas condiciones de iluminación.
  • Lleva tus productos favoritos: Si tienes productos de maquillaje que usas habitualmente, como tu labial o base, tráelos contigo. Así garantizamos que el resultado sea totalmente a tu gusto.
  • Habla claro sobre tus preferencias: La prueba es el momento perfecto para expresar cualquier duda o inseguridad. No esperes al día de la boda para mencionar lo que no te convence, ya que ese día todo debe fluir sin contratiempos.
Maquillador aplicando labial durante la prueba de maquillaje de novia
Cindy en bata blanca tras terminar su prueba de maquillaje nupcial
Sheyla recibe retoques de labios durante su prueba de maquillaje nupcial

El retoque: otro esencial del maquillaje para bodas

En Aire de Fiesta consideramos fundamental que el maquillaje de la novia luzca impecable y, debido a nuestro clima y a que la mayor parte de las ceremonias son exteriores, el retoque se vuelve esencial. Por eso, en nuestro acuerdo con Michel Rego, el retoque siempre está incluido, normalmente justo después de la ceremonia, para garantizar que el look permanezca fresco y perfecto en las primeras fotos y momentos de la recepción.
Si deseas el retoque en otro momento del evento, como después de la cena o antes de comenzar la fiesta, es importante comentarlo desde el principio, así como si deseas un segundo retoque. Esto nos permitirá renegociarlo con Michel, ya que implica tiempo adicional de su parte y debemos coordinarlo adecuadamente.
Es importante tener en cuenta que el retoque no debe confundirse con un cambio de estilo completo. Si tienes en mente realizar una transformación significativa entre la ceremonia y la recepción, es otro aspecto que debes comunicar a tu planner y al estilista. De esa manera, podemos asegurarnos de cotizarlo adecuadamente y planificarlo sin contratiempos.

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