Diseñar una boda moderna y elegante en un entorno de jardín fue el principal objetivo al concebir este evento. Los novios deseaban una ceremonia totalmente personalizada, que abrazara la belleza del lugar y que fuera a la vez clásica y atemporal.
Desde el diseño de las invitaciones hasta el menú de la cena y los números de mesa, los motivos geométricos y los tonos dorados guiaron todo el diseño de esta boda moderna en La Habana.
El arco de bodas tradicional fue sustituido por uno de apariencia hexagonal que se diseñó a la medida. A partir de allí el resto de los elementos fueron proyectados para integrarse al concepto general.
Las flores blancas y el follaje verde resultaron una elección perfecta para acompañar el diseño propuesto y se convirtieron en la base de la propuesta en la ceremonia.
Las líneas limpias, materiales como el metal y opciones no tradicionales en los centros de mesa fueron la apuesta para el espacio de la cena. No faltaron las formas geométricas suspendidas, que añadieron carácter, singularidad y elegancia a esta área.
En el espacio de la recepción también se impusieron los tonos metálicos, el blanco y el dorado. El photocall y el pastel de la boda llevaron los motivos geométricos a este espacio y le otorgaron el aire glamuroso que los novios deseaban.
El cierre de la fiesta con las luces de la ciudad de fondo fue la nota ideal para concluir un día de boda con mucho estilo. Los invitados de La Habana, Nueva York y otras ciudades del mundo pudieron disfrutar de una jornada llena de buena energía y muchísimas emociones.
Coordinaión, deco y flores: Aire de Fiesta Cuba
Lugar: La Divina Pastora
Fotos: Iván Botello