En La Guarida, uno de los restaurantes más emblemáticos de La Habana, Maricarmen y Alejandro celebraron su boda. Los novios disfrutaron de un día diferente, diseñado enteramente a la medida. Para empezar, sesión de First Look en La Habana y fotos por el centro histórico, antes de llegar juntos y de la mano, a su ceremonia.
Tomando ventajas de la ubicación de este restaurante, con vistas impresionantes desde su terraza, hubo un nuevo momento de fotos para la pareja, antes de comenzar la ceremonia de boda.
Además del encanto natural de este popular sitio, la decoración incluyó papel picado (con un guiño a México) y arreglos florales con velas en la escalera principal.
En la celebración que siguió no faltó la música tradicional cubana en vivo, los habanos y la alegría de los recién casados compartiendo con su familia y sus amigos. La terraza fue el lugar perfecto para crear un ambiente relajado y muy especial. La iluminación con guirnaldas de bombillos contribuyó a esa sensación de calidez.
Si fue un acierto la elección de los espacios, también lo fue la distribución del mobiliario en el lugar, creando rincones para disfrutar de la comida, la bebida, las conversaciones y el tiempo de baile.
Una boda íntima y única, en el corazón de la ciudad.
Coordinación, deoc y flores: Aire de Fiesta Cuba
Fotos: Ivan Botello
Estilista: Michel Rego
Lugar: La Guarida
