Evento: Bodas
Categoría: Platinum
Locación: La Guarida
Tipo de Locación: Salón
Las bodas más asombrosas son esas que desde el inicio
expresan la singularidad de la pareja, quiénes son, qué aman uno del otro, qué
los hace sonreír, y su historia, sus nostalgias, sus motivaciones. Para Jorge y Lázaro, la decoración de su boda debía transmitir las mismas sensaciones que nos transmite La Habana, esa capital de sus nostalgias.. En un estilo elegante, pero con un marcado acento vintage, el punto focal de la ceremonia estuvo en el trabajo de floristería, follaje y rosas blancas, acompañadas por velas en diferentes alturas.
Para la cena en la terraza, el concepto seguido fue similar, con un arreglo central alargado que se llevaba el protagonismo en la mesa. Miles de detalles trabajados con porcelana vintage y quinqués fueron dispuestos en varias de las zonas de paso de La Guarida, para armonizar con el ambiente del lugar y con el tono de la boda.
La historia del lugar, el ambiente propio del restaurante y sus alrededores, y la propuesta de decoración se enlazaron y enriquecieron unos a los otros, para obtener este resultado visual y entregar un pedacito de La Habana, como regalo de bodas, a estos enamorados.